domingo, 6 de diciembre de 2009

Música y lágrimas (1954)

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Películas - por Pilar Alonso


Esta película, titulada originalmente The Glenn Miller Story, narra la vida del famoso músico norteamericano, interpretado por un maravilloso James Stewart. Ganadora de un Óscar al mejor sonido y dos nominaciones por la banda sonora y el mejor guión original, se estrenaba diez años después de la desaparición de Miller durante la Segunda Guerra Mundial.

La cinta explora algunos de los episodios que marcaron la carrera del músico, sus modestos inicios en California y su posterior éxito en New York tras años de duro trabajo y de búsqueda de un sonido propio, un sonido que la juventud norteamericana no tardaría en adoptar.

En la película juega un papel primordial su esposa Helen Berger, interpretada por una June Allyson más que convincente, que es apoyo e inspiración constantes. Y también figuran no sólo varios de los componentes de la auténtica banda de Miller, también algunos músicos que le conocieron y que se interpretan a sí mismos: Loui Amstrong, Gene Krupa o Ben Pollack entre ellos. Es fantástica la escena en la que varios de ellos actúan sobre el escenario para celebrar la boda entre Glenn y Helen.
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Porque la música es esencial en esta película, los arreglos musicales que hicieron famosos a Miller y a su orquesta, magníficamente interpretados. Es imposible permanecer con los pies quietos mientras suenan piezas como Moonligh Serenade, Pennsylvania 6-5000 o In the mood, que fue número uno durante quince semanas consecutivas en 1940.

Es muy probable que la película, un tanto edulcorada, no sea una visión real del personaje y que las cosas no sucedieran tal y como nos las presenta su director, Anthony Mann, pero la historia funciona de principio a fin, la música es estupenda, tiene buena fotografía, buen elenco de actores y algunas escenas fascinantes.

Música y lágrimas es un excelente tributo a uno de los mejores músicos del siglo XX.
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3 comentarios:

Fuensanta Niñirola dijo...

Hola, Pilar; la peli que comentas la he visto unas cuantas veces, es muy bonita. Sí, ciertamente, tiene un cierto sabor dulzón, pero es que la historia en sus rasgos principales, fue así, y June Allyson, que está muy bien, por supuesto, es casi inevitable endulce el producto. Es una historia muy norteamericana, en el sentido de que el que empieza de la nada puede llegar a cualquier sitio que se proponga, y tal.Sobre todo, si hay talento y voluntad. James Stewart está magnífico, como siempre: es uno de los mejores actores que he conocido y uno de mis favoritos. Justamente anoche me puse "Anatomía de un asesinato", de Otto Preminger, basada en una novela homónima que estoy ahora leyendo, y el papel principal lo borda Stewart, ayudado por unos secundarios muy competentes, como un Ben Gazzara muy sobrio y una provocadora Lee Remick en el que podría ser su mejor papel.
Saludos, chata!

Anónimo dijo...

Hola Pilar, ante todo Feliz 2010. Soy Ratón Atreides y he estado algo desconectado por culpa de una dolencia aunque me estoy recuperando. El blog si que sigue en forma por lo que veo, asi que nada un abrazo... Ah por cierto esta película la sigo teniendo en VHS y cómo no es una gran película y si además te gusta ese tipo de música aún la disfrutas mucho mas.
Hasta pronto.

Historia y Libros dijo...

Ratón, cuánto siento que hayas estado malito!! Feliz Año para ti también.