miércoles, 1 de abril de 2009

Elizabeth. La edad de oro. (2007)

.

Películas - por Pilar Alonso

Esta película, secuela de Elizabeth (1998), se inicia en el año 1585. España es la nación más poderosa de Europa y los barcos que provienen de América son constantemente atacados por los ingleses. El enfrentamiento entre ambas potencias es inminente.

Mientras tanto, Isabel I (Cate Blanchett) es aconsejada sobre la conveniencia de contraer matrimonio y le son presentados los retratos de varios príncipes europeos. Fiel a su costumbre, rechazará a todos los pretendientes y se enamorará de Walter Raleigh (Clive Owen), un marino que proviene de América y que le relata sus increíbles aventuras.

La corte de Felipe II (Jordi Mollá) trata de apoyar la candidatura al trono de la católica María Estuardo y rival de Isabel I. Pero el complot fracasa y conduce a la inevitable guerra entre las dos naciones.


No hay duda de que nos encontramos con una buena puesta en escena, excelente fotografía y un vestuario extraordinario. A pesar de las licencias históricas que se tomaron los guionistas, la cinta resulta bastante sugerente. Ante eso no tengo nada que decir.

Pero la interpretación de Cate Blanchet del personaje principal no me ha convencido. Histriónica, exagerada en sus ademanes y sus reacciones, me ha resultado muy alejada de la imagen que me había hecho de ella a través de distintas lecturas.

Pero lo peor, lo que me ha resultado más ofensivo, es la caracterización de Felipe II, interpretado por Jordi Mollá, que resulta francamente patético, excesivo en su papel de garante de la Cristiandad y beato hasta el paroxismo.

Entendería los desmanes de ambos monarcas si se tratase de la adaptación de una obra contemporánea a sus protagonistas pero, hoy en día, con la abundancia de documentación existente, echar mano de la Leyenda Negra española para retratar a un personaje del calibre de Felipe II me parece un recurso irrisorio, con el único objeto de ensalzar la labor de Isabel I de Inglaterra. Creo que se podría haber logrado el mismo efecto sin necesidad de caricaturizar la figura del monarca español.
.
Una película bastante irregular, con momentos memorables y otros que bien podrían haberse evitado, situaciones poco verosímiles y personajes escasamente convincentes con alguna salvedad, como Walter Raleigh.

Para mi gusto es una cinta para pasar una tarde entretenida, si no se os hace mala sangre como me sucedió a mí.
...

6 comentarios:

Anónimo dijo...

Esto que leo me hace pensar lo siguiente:

El film “Alatriste” es una magnifica adaptación del espíritu de las novelas de Pérez-Reverte, y diría incluso que es superior en cuanto a realismo. Y por todo eso pienso que es una obra digna de ser contada y difundida. Claro que, si del montaje resulta un argumento tan pantanoso, pues la consecuencia lógica es que, a pesar del boom inicial de espectadores por la trampa publicitaria, una visión tan ecuánime del XVII no consiga difundirse ni acabar morando en el saber colectivo de la humanidad, pues para ello, las películas, como los best-seller o el teatro o lo que sea, deben ser como un supositorio que cuele fino.

Elizabeth, en cambio, es una película que guste o no, funciona. Cualquiera puede recomendarla o querer volver a verla. A mí no me dijo mucho, pero si perfilan un poco más el tema lo mismo se llevan ochenta oscares y se va directa al limbo del cine legendario y su contenido, con todos sus despropósitos y poca rigurosidad, al saber colectivo hispánico o mundial.

Así las cosas, la leyenda negra llegará fresquita para cuando se normalicen las relaciones culturales entre los humanos y las diferentes etnias intergalácticas.

J.A.

Oscar González dijo...

Desde luego no sé quien ha sido el lumbrera que ha dado ese subtítulo a este gran, emperifollado, prepotente, soberbio (y no el sentido positivo) y sobre todo estúpido bodrio. Tentado estuve de levntarme de la butaca y largarme de la sala de cine cuando la vi en su momehto. Porque, la verdad, lo que aquí nos muestran es un cruce de la peor novela romántica barata y la más nefasta película de superhéroes jamás filmada.

Y mira que el tema da para una película preciosa, con una historia que da mucho jugo. Pero si ya desde el principio no respetan las edades (en las fechas que relata este producto Isabel I de Inglaterra tenía más de 50 años, Felipe II pasaba de los sesenta, etc.), se pierden con topicazos hasta la náusea (Isabel, la Rrina Vírgen, el fanatismo religioso de Felipe II, obviando el resto de fanatismos, de los que Isabel no estaba excluída) y realmente no aporta nada.

Desde un Jordi Mollà como Felipe II que es una parodia, no sé si pretendidamente, pero les ha salido un monarca que es para denunciarlo a la Santa Inquisición. Un Walter Raleigh en la piel de Clive Owen que parece un chulo cualquiera de discoteca, una María Estuardo estridente, una Isabel I que parece tener la necesidad de sobreactuar en cada momento o de soltar una frase pretendidamente ingeniosa.

El cine no tiene por qué seguir al pie de la letra lo que la Historia ha mostrado, para eso es cine, para entretener y dar una visión personal. Pero una cosa es tomarse licencias y otra hacer el ridículo, y esta película lo hace, desde el principio y hasta el final. Se salvan muy pocas escenas, se salvan muy pocos actores, apenas hay nada que sea mínimamente interesante. Todo es grandilocuencia, vacuidad, diálogos absurdos, escenas de acción mal hechas. Y podría contar más, pero entonces mi cabreo sería mayor.

Sin duda, la peor película que he visto en muchos años, y creo que de las peores de la última década. Con lo sobrio que le había quedado a Blanchett su papel de reina inglesa en la 'Elizabeth' de 1998. Ahora, diez años después, hace el más absoluto de los ridículos.

Historia y Libros dijo...

Veo que a ti aún se te hizo más mala sangre que a mí :)

Oscar González dijo...

Es que pagar por esto...

Raúl dijo...

Bueno, tras leer esto, seguro que no veré esa peli, y más aún porque me gusta ese momento histórico. Alguien se tiene que estar removiendo en el Escorial. No la he visto, por tanto sobra que escriba más, pero es que también me molesta ver cómo siempre se usa y abusa de la clásica fórmula de guión 'en momentos turbulentos y de aventura, un espíritu romántico con su historia de amor tiene que batirse contra el malo de turno'. De todas formas, más fácil les hubiese salido una peli buena (y también como peli comercial) basando la historia entre Isabel y su hermana María Tudor en la juventud, intentando no caer tampoco en el maniqueismo parcial de católicos contra protestantes (sea quien sea en este caso el malo de turno).

Historia y Libros dijo...

El trasfondo de la película no está mal, Julián, es decir, la pretendida historia que querían contar. En mi caso fueron los modos de contarla, bastante pobres y mal enfocados. La lucha entre católicos y protestantes, con la figura de María Estuardo en escena, podría haber dado para mucho más sin necesidad de recurrir a la historia de "amor" con tantos aspavientos y sin recurrir a tergiversar la historia en demasía.

Así es que no, resumiendo, no te la recomiendo. Y menos si el perído histórico te gusta.

Eso sí, es vestuario es soberbio. Es lo mejor que tiene la peli para mi gusto.